Cristóbal Colón realizó, que se sepa, cuatro testamentos: uno en 1498 donde aparece la famosa frase “siendo yo nacido en Génova”, otros dos de 1502 y 1505 que nunca aparecieron pero que el los nombra, y el último de 1506 poco antes de su muerte.
El testamento de 1498 que contiene la única prueba existente de una nacionalidad genovesa, es falso:
• La firma que aparece no se corresponde con la grafía del Almirante y cometen varios errores al colocar los puntos que Cristóbal Colón situaba a cada lado de las eses.
• Se da como vivo al Infante D. Juan cuando había fallecido el 7 de octubre de 1497. Cuando se presentó este documento para el pleito hereritario ya habían pasado 80 años desde los hechos.
• No fue elevado a escritura pública.
• Varios litigantes sacaron paulinas, eran unos despachos o cartas de excomunión que se expedían en los tribunales para el descubrimiento de algunas cosas que se sospechaba habían sido robadas u ocultas malicio samente, tomaron tal nombre por haberlas instituido el Papa Paulo III.
• Aparecen varios renglones tachados y con distintas fechas.
• Los giros gallegos que Cristóbal Colón tanto usaba en su habla y escritura, aparecen correctamente en el de 1506 y reemplazados en el de 1498 : aviamiento en vez de aviamento, señalar en vez de aseñalar, sellará en vez de asellará, entienda y entiende en vez de intenda y intende, asimismo en vez de asimesmo, almirantdgo en vez de almirantado, privilegio en vez de privillejo y privillejos, muestre en vez de amostrar.
• La institución no era de su letra, al documento le faltaba una hoja, la más importante, y el tribunal con signa que: “no está auténtica ni solemne”
• Aparece firmada por los Reyes Católicos y su secretario de Estado, don Fernando Alvarez, que había muerto en 1501 y que desde cuatro años antes no firmaba.
Del testamento de 1506 se conservan dos copias, una de ellas como en el de 1498 tampoco se conserva original firmado por Cristóbal Colón, con los testigos, ni dando fe el escribano, como era legítimo en la época; la otra copia cuenta con bastantes garantías de autenticidad en su protocolo, pero la autenticidad de estas copias se la concede un reflejo de ellas de 1524 en el testamento de Diego Colón realizado también en Valladolid. Por tanto este es el testamento legítimo, donde no se menciona para nada Génova.
Diego Colón sabía que este era el auténtico testamento, por ello, otorga en el suyo poderes a su camarero Fernando Valdés para solicitar al alcalde un traslado del testamento de su padre (1506) y varias copias que se “deberían signar en pública forma, para que baliesen e hiziesen fee”.
En este documento fechado en 1524 aparece como testigo Diego de Sotomayor hijo mayor de Pedro Madruga, el mismo para el que Cristóbal Colón solicitó la mejorada, el mismo que parecía hijo bastardo del Almirante de Indias según la crónica del Francesillo de Zúñiga escrita para el emperador Carlos V.
Mientras figuraba como testigo de Diego Colón en un poder para rescatar el testamento de Cristóbal Colón y poder este establecer mayorazgo, Diego de Sotomayor, en ese mismo año, en la misma ciudad, también intentaba unificar los bienes y derechos de los Sotomayor en uno e indivisible y establecer mayorazgo en su sobrina, lo consiguió un año más tarde.
Por tanto los dos hermanos se encargaron en ese año de separar y garantizar convenientemente cada uno de los dos linajes, los Colón y los Sotomayor. No obstante, los linajes Sotomayor y Colón se han ido cruzando paulatinamente durante siglos.
Esto enlaza completamente con el capítulo VIII del libro de Rodrigo Cota (Colón, Pontevedra, Caminha)donde publica la contundente crónica del Francesillo sobre Diego de Sotomayor y su parentesco con el Almirante.
Pero destaco de lo expuesto por Rodrigo Cota, lo siguiente:
«El 4 de marzo de 1493, apenas unas semanas después del regreso de su viaje de descubrimiento, Colón escribe una carta a los reyes, en donde entre otras cosas les pide a los reyes que demanden al Papa Alejandro VI un cardenalato para su hijo.
¿En quien «debía estar pensando don Cristóbal»? (cita a Consuelo Varela). Diego Colón habría de suceder a su padre, según las Capitulaciones de Santa Fe, y Fernando Colón tenía solo 5 años.
Lo lógico es pensar, y así lo sostenemos, que aquel cardenalato se pedía para Diego de Sotomayor, el misma para quien, como afirma sin ambages Francesillo de Zúñiga, Colón fue «solicitador de la mejorada». No conseguido el cardenalato para Diego de Sotomayor, Colón se conformaba con que le concedieran una encomienda en la orden e Alcántara, orden en la que los Sotomayor y sus primos los Zúñiga tenían gran influencia y en la que Diego de Sotomayor ya era caballero y a la que dedicamos el siguiente capítulo.»