El atril que usó el capellán de Cristóbal Colón en las misas que ofició en Cuba, que el Vaticano considera el objeto más antiguo del arte cristiano indígena en América, será exhibido en la isla en el marco de la visita del Papa Benedicto XVI, en marzo.
“El Museo Etnológico Misionero del Vaticano ha traído a La Habana el más antiguo ejemplo de arte cristiano indígena del Nuevo Mundo para ser exhibido durante un año” en el Museo de la Ciudad, en el antiguo Palacio de Capitanes Generales, anunció este viernes el diario oficial Granma.
Dijo que el secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, autorizó ”con carácter excepcional” el préstamo del atril de misa al museo cubano, a solicitud del historiador de La Habana, Eusebio Leal, quien dirige el programa de preservación del centro de la capital, declarada patrimonio por la Unesco en 1992.
La reliquia comenzará a ser exhibida el 5 de febrero, precediendo a la visita a Cuba del 26 al 28 de marzo de Benedicto XVI, segundo viaje papal a la isla, después de la de su antecesor Juan Pablo II en 1998, que marcó el fin del hielo en las relaciones entre la Iglesia Católica y el gobierno cubano.
Granma precisó que el atril, que “ilustra el proceso” de transculturación ”que germinó gracias” al encuentro de dos culturas, fue usado por fray Bartolomé de Las Heras, capellán de Colón en su segundo viaje a América (1493-1996), en el que visitó varias islas del Caribe, incluida Cuba.
En este atril o “facistol”, el sacerdote colocaba el misal (libro de misa) durante los oficios religiosos en el Nuevo Mundo.
Tallado a mano en madera en forma de concha, el atril tiene incrustadas en su superficie finas tiras de hueso de pescado y de caparazón de tortuga carey, dispuestas con vistas a crear un efecto de claroscuro, añadió el periódico.
Destacó que la concha, asociada en la iconografía cristiana “a la resurrección y a la vida eterna”, tenía para los indígenas “un elevado valor simbólico”, vinculado “a los cultos al agua y a la fertilidad”.
Cuba, que hasta 1991 tenía como política oficial el ateísmo, declaró monumento nacional en agosto pasado a la “Cruz de la Parra”, la única que se conserva de las 29 que Colón plantó en sus viajes a América, como parte de los festejos por los 500 años de Baracoa, ciudad primada cubana, en el extremo oriental de la isla.
La cruz fue plantada por Colón el 1 de diciembre de 1492 en la costa de Baracoa y fue llevada a la iglesia del lugar después de la fundación de la ciudad en 1511, donde es conservada hasta ahora.
La visita de Benedicto XVI, una peregrinación de la imagen de la Virgen por toda la isla y una misa en los actos por los 500 años de Baracoa, son frutos de un inédito diálogo iniciado en 2010 por el cardenal cubano Jaime Ortega y el presidente Raúl Castro, que condujo a la excarcelación de unos 130 presos políticos.
Un grupo de avanzada del Vaticano, encargado de los viajes papales, visitó Cuba la semana pasada y constató que los preparativos para la gira del Papa, que también incluye México, están “muy avanzados”, dijo a la AFP el secretario ejecutivo de la Conferencia Episcopal de Cuba, José Félix Pérez.
La Iglesia dijo que el Papa será recibido el 26 de marzo por el presidente Raúl en Santiago de Cuba (sureste), donde oficiará al día siguiente la primera de las dos misas que realizará en la isla, dedicada a los 400 años de la aparición de la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona nacional.
La otra misa la oficiará el día 28 en la Plaza de la Revolución de La Habana.