En el «Livro do concello” de Pontevedra se registra el pago de tres florines de oro al pintor G. Vasco por la “Carta do mundo para o noso señor o arcebispo de Santiago». El prelado era don Lope de Mendoza. “asaz gracioso y de dulce conversación», amigo de las gentes del mar y de los orfebres, que gobernó la sede entre el 1400 y el 1435. Una hermana suya casará con Payo Gómez de Soutomayor, el de la aventurosa embajada al Gran Tamerlán. Pasados años, un Vecino de Palos, Martin Alonso.
Pinzón, “sabio en mucha manera», “que no había hombre tan determinado en aquel tiempo”, se valía de sus amistades en el Vaticano para traerse una carta del orbe. Cuando hablamos de estos testimonios de la visión océano, gráfica de los predecesores del descubrimiento del Nuevo Mundo, evocamos los viejos secretos ..recordad el mapa de Yale y el “arcano” de las navegaciones, tan viejo que ya los griegos y los púnicos ocultaban y envolvían en tremebundos pormenores las rutas de nuestros finisterres atlánticos.
Martín Alonso Pinzón fue el navegante científico, el hombre avezado, poderoso y destemido de la empresa donde la suerte y la fama estuvieron al lado de Colón, tan envuelto en misterios como el propio mar cuyas tinieblas rompían las carabelas.
Mientras en Pontevedra se honra a Colón, buscando sus líneas familiares y confrontando los nombres de lugares descubiertos gemelos de los que aparecen en estas riberas, Bayona de Minor conmemora cada año, cuando marzo comienza, la llegada de la “Pinta» y la honra de haber sido el primer lugar del Mundo Viejo que supo del descubrimiento del Nuevo. Es como un justo tributo al navegante que desde el catorce de febrero de 1492, en que se apartó por segunda vez de Colón, y que lo creía muerto, al naufragar en la terrible tormenta que sufrieran, venia dispuesto a recoger las honras y provechos de un viaje que. ciertamente, había sabido guiar y proseguir, con la decisión de su atrevido “ ¡adelante!” y que había sido el primero en divisar tierra» y en reconocerlas.
Pese a que Colón había rendido parias a don Manuel de Portugal, adelantándole las buenas nuevas, los Reyes iban a tratar solamente con Colón, y Pinzón apartado moriría, apenado en aquel convento de franciscanos de La Rábida, que tanto había significado en la empresa.
Son muy cortas las referencias que Fernando de Colón y Fernán, dez de Oviedo nos dan sobre la llegada de la “Pinta” a la ría gallega. Están por revisar ..y has. ta por novelar., los pormenores. Creo que nada puede hallarse ya en el Archivo de Bayona, mar- jado por Santiago y por Rar Puede, en cambio, sacarse pi cho de los “Pleitos colombíu- estudiados por Asensio, Navarrv. te. Fernández Duro, florales Pa. drón…
Algunas diligencias se hicieron en I.a Coruña. Va sabéis que los litigios “ I-urgieron cuando la fa.
milia de los pilotos Pinzones de. mandaba que le fuera reconocido al difunto Alonso la prioridad en la idea del descubrimiento, apren. dida en aquellos libros y mapas del Vaticano y que veía confir. mada en las Escrituras; la inde. pendencia y hasta la superior!, dad con que se había regido al la. do del Almirante; que se había adelantado a anunciar que avis. taba tierra y luego en recorrerla y hacer rescates… V que Colón había pactaüo con él repartirse ganancias y provechos.
Para Imaginar el rev>»e!o que armaría en las costas gallegas la arribada ..quizás debida a la ex. periencia de un piloto oriundo de estas tierras, García Sarmiento…
‘Abasta leer liT^Hé suceuio é-‘nl’a. los cuando llegó la “Niña”. Treinta y tres de los testigos que presenciaron el acontecimiento de Bayona declararon que habían ha. blado con Pinzón y sus marine, ros, que oyeron el relato de la na. vegación, que era tema de las conversaciones en casas y playas “de suerte que no se hablaba de otra cosa”. Pedro Enriquez. ve. ciño de Palos, dio’testimonio de que, mientras estaba la “Pinta» en la playa para reparar sus mu. chas averias, ‘‘vio los indios que traía Pinzón, ¿le la isla de GualT. nani, e ie dijeron que el Almiran. te había descubierto las islas… e ese testigo, hubo el presente de cuatro onzas de oro que le dio el contramaestre… “Martín Alonso Pinzón se avistó con el corregí, dor de la villa . le hizo entrega de un mensaje para los Reyes. Reparada la nao, salió rumbo a Palos, y no se detuvo en ningún puerto portugués. Pero llegó des. pués que Colón… No recogió el fruto de sus esfuerzos. En cam. bio .fue calumniado por los mis. mos a quienes había servido.
La gran noticia llegaría al pe. Irero que labraba los baldaqui. nes que, en la iglesia de Caldas, Iban a cubrir la sepultura de los descendientes de los Charino, Mendoza, Sotomayor… * querría dejar en ellos el recuerdo del he. cho. Si fue asi, es la primera ver. sión plástica de aquellas “islas” que no eran una parte de la In. dia, sino todo un “Orbe Nuevo».
José
FILGUEIRA VAL VERDE