Con el fin de dar a conocer a cuantos pueda interesar la afirmación, una vez más, del origen hispano del insigne Cristóbal Colón Fonterosa, descubridor del Nuevo Mundo, reproducimos, pues, para su difusión la notable interpelación hecha en el Congreso de los Diputados, por el brillante orador parlamentario D. Emiliano Iglesias; excitando al Gobierno a que miembros de la Real Academia de la Historia, se trasladen a Pontevedra, a fin de comprobar en dicha ciudad cuantos datos y referencias evidencian ser la citada ciudad gallega, cuna del gran Almirante de las Indias.
Ello nos llena de regocijo y satisfacción, en ver que la tesis del genial la Riega, será admitida universalmente dentro de poco, y a España le corresponde toda la gloria del descubrimiento de América.
RUEGO que el Diputado a Cortes por Barcelona, D. Emiliano Iglesias Ambrosio, dirigió al Gobierno para que una Comisión de Académicos practique investigación en Pontevedra acerca de la patria del inmortal navegante Cristóbal Colón.
Con la venia del Sr. Presidente, dijo:
El Sr. Iglesias Ambrosio: Para dirigir un ruego al Gobierno, puesto que debe ser, a mi juicio, cuestión de Gobierno el atenderlo, porque se refiere a cosa que afecta a la gloria de España.
Cuando ayer tarde oía yo las levantadas palabras del Sr. Presidente del Consejo de Ministros excitando a todos los nacionales para que exaltáramos el sentimiento de la Patria, pensaba en el descuido en que constantemente tienen los Gobiernos las iniciativas de los pueblos como si éstas no merecieran aquella atención preferente que determina el ser expresión de la voluntad de los mismos y de ese levantado espíritu patriótico a que hacía referencia el Sr. Presidente del Consejo de Ministros.
La región gallega, preferentemente la ciudad de Pontevedra, durante estos veinte años del siglo que corre, viene realizando una labor meritísima para averiguar el origen del inmortal descubridor de las Amérieas. Las dudas que sobre su nacimiento ha habido siempre, originadas por testimonios irrecusables de los que le trataron, como Bernáldez y el padre Las Casas; por el testimonio de su propio hijo Fernando; por el examen crítico de su institución mayorazga; por el fracaso ruidoso de la genealogía colombiiana, y por otra multitud de elementos pon- derables que no son del caso exponer aquí, pero que tienen una fuerza incontrastable, han exicitádo a personas insignes, a investigadores a los que la Patria debe reconocimiento, a procurar poner en claro el origen del Almirante. Y primero, el insigne pontevedrés investigador, don Celso García de la Riega, en un memorable libro que se titulaba “Colón, español”; más tarde el Dr. Rodríguez, de grata memoria, y otros pensadores, como el Sr. Enrique Ma de Arribas, en el Ateneo de Madrid, abrieron brecha para que, despertándose en Amériaa el interés por conoicer el origen del descubridor de aquellas tierras, se vinieran acumulando datos y se vinieran prestando contribuciones históricas que permitieran en un día determinar, de una manera clara y concreta, que Cristóbal Colón era español, punto fundamental que es preciso verificar una vez descartada la hipótesis de italianidad, syempre puesta en entredicho, pero hoy eliminada por completo gracias a la labor de esos hombres y otros muchos que no cito.
Hace unos días, recientemente, se ha publicado un libro que viene a contribuir a esta obra de reivindicación de la nacionalidad del inmortal Almirante, y en ese libro a que me refiero, publicado por un gallego, a quien rindo desde aquí el homenaje de mi admiración, por don Prudencio Otero Sánchez, documentalmente, con pruebas que no dejan lugar, a duda, completando la labor, verdaderamente, fundamental, del ilustre Rafael Calzada, ex Diputado por Madrid, de una manera rotunda se determina, como si fuera hecha con un diagnóstico diferencial, la eliminación de que Cristóbal Colón fuera italiano. Esta vindicación histórica de la Patria del insigne descubridor de América reportaría a la nuestra títulos aun más excelsos que los que tiene para aquellas tierras y para la Historia.
Pontevedra, a quien se deben todas las iniciativas y todas las contribuciones para fijar la nacionalidad española de Cristóbal Colón, porque ha sido en Pontevedra en donde Riega halló la documentación para su libro, y en el despacho del ilustre arqueólogo Sr. Sampedro, en donde surgieron las primeras luces al descubrirse en documentos contemporáneos el apellido Colón. Pontevedra, repito, que se ha preocupado hondamente de esta’ cuestión el año 1917, requirió el concurso de la Academia de u Historia para que ella contrastara todos los documentos y formulara un juicio respecto a los ele- m en tos probatorios que se encuentran en aquella ciudad y sus contornos para afirmar la
nacionalidad española de Colón. La Academia de la Historia aceptó este cometido, y ya se ha designado una
Comisión de tres señores académicos para ir a Pontevedra, cuando surgió el movimiento del año 17, en el que tantas esperanzas pusimos todos, de donde han salido tantos Ministros, aunque también hayan salido tantos desengañados pomo nosotros, y y por aquella razón los individuos designados por la Academia de la Historia no pudieron ir a Pontevedra. Se hicieron nuevas gestiones con los señores académicos para que realizaran este viaje, colocando en Madrid los fondos necesarios, a fin de que ellos pudieran realizarlo y comprobar allí todos los elementos a que me refiero; pero se fué defiriendo hasta dejarlo en el olvido, como si no tuviera la magna importancia que denuncia la sencilla enumeración clel problema histórico.
Mi ruego se dirige a esto y conmigo seguramente el de toda la Cámara, a excitar al Gobierno a fin de que éste a su vez lo haga, al celo y al patriotismo de estos sabios oficiales para que, concurriendo a aquella ciudad, comprueben allí, vno por meros elementos escrituarios en las oficinífS, sino realizando la comprobación en cada sitio, en cada lugar, todo este material acumulado por beneméritos patriotas y excelsos hijos de aquella ciudad insigne y maravillosa, de portentosa y mágica belleza natural y madre de insignes varones gloria de la Patria.
El hecho de que haga pocos días se haya publicado este libro a que me refiero del Sr. Otero Sánchez, libro magnífico y de gran valor contributivo a la solución de este problema y en el cual de una manera gráfica se comprueba el origen y nacimiento del insigne descubridor, es motivo y ocasión para que yo me levante aquí, no a excitar el celo, porque ello ofendería su patriotismo, pero sí a notificar al Gobierno este suceso notable de publicidad que agudiza la necesidad de dar carácter oficial y variado a estas investigaciones que tanto dicen de nuestra cultura y de nuestro amcr a la Patria.
Yo tengo la seguridad absoluta de que el Gobierno, recogiendo la excitación que surge del propio hecho y de la simpatía cordial de toda la Cámara, tendrá el galardón y el honor de ser el propulsor de esta magna obra, que sería la vindicación histórica más formidable de cuantas se tenga noticia. Bastaba para ello el enunciado, pero, además, en el banco azul hay quien siendo gallego tiene un deber inexcusable de enaltecer aquel país; enalteciendo así la gran Patria española, que es la que se asocia de corazón, por profundo convencimiento, a esta obra que intentamos. Nosotros no pretendemos que se nos conceda gracia ni que se nos haga el favor do declarar hijo de Pontevedra al gran almirante, porque ello sería necio si no fuera algo peor; lo que pedimos, y a ello tenemos derecho, es que se comprueben los documentos, las pruebas que han sido acumuladas a través de los tiempos por tantos beneméritos hijos de aquella ciudad y por otros investigadores gallegos, españoles y americanos, por quienes tienen esa misión, y por eso reclamamos el concurso de la Academia de la Historia. Y esperando que el Gobierno recoja esta excitación y que rápidamente habrá de atender a la comprobación de estos extremos, que enaltecerán a España exaltando la magnífica personalidad de aquel país de ensueño, pongo término a mi ruego.
El Sr. Ministro de Gracia y Justicia (Ordóñez) : Pido la palabra.
El Sr. Presidente : La tiene S. S.
El Sr. Ministro de Gracia y Justicia (Ordóñez) : Carezco de competencia suficiente en estudios históricos para poder sentar aquí, contestando al elocuente discurso de mi querido amigo y paisano el señor Iglesias Ambrosio, una afirmación categórica, solamente puedo decir que, por afición a esos estudios, he deducido de mis lecturas un íntimo convencimiento de que es absolutamente exacto lo
que el señor Iglesias manifestaba.
Y de no haber bastado esas lecturas, seguramente el efecto de los razonamientos persuasivos del insigne González Besada, a quien muchas veces oí exponer, con aquella fastuosidad, de su palabra, toda esa teoría del origen de Cristóbal Colón, sería suficiente para que en mi espíritu la convicción hubiera arraigado con raíces hondísimas.
Por todas las razones que el Sr. Iglesias ha expuesto, por lo que eso significaría para la gloria de España, y en especial para la provincia de Pontevedra, por la obligación que por razón de origen, pesa sobre mí de coadyuvar a esta tendencia a que el Sr. Iglesias nos estimula, acojo con mucho gusto sus indicaciones, no puedo hacer otra cosa, y las trasmitiré al Gobierno, seguro de que éste, dentro de sus facultades procurará recabar de la Academia de la Historia, compuesta de hombres tan ilustres, de sabios tan eminentes, que haga las gestiones precisas para ver si, en la realidad, pueden tener confirmación las ideas tan luminosamente expuestas por muchos investigadores, y de las cuales se ha hecho eco esta tarde en la Cámara mi amigo particular el señor Iglesias.
El Sr. Iglesias Ambrosio: Pido la palabra.
El Sr. Presidente-. La tiene S. S. para rectificar.
El Sr. Iglesias Ambrosio: Mi ilustre jefe dice que como el 90 por 100 de los que a la Cámara pertenecemos somos gallegos, ya está ganado el pleito. (Risas.) Nosotros queremos ganar el pleito, no por sufragio, sino por comprobación científica, conforme a los métodos más severos de la crítica histórica. (El «Sr. Ñongues: Y con costas.)
Agradezco mucho las manifestaciones de mi particular amigo el Sr. Ministro de Gracia y Justicia y espero serán recogxlas por el Gobierno; para llevar a cabo, con toda clase de elementos, esta magna vindicación histórica.
También confío en que la Academia de la Historia, compuesta de tan venerables e ilustres varones, cumplimentando el acuerdo del año 1917, y de acuerdo con el Gobierno y las Corporaciones de Pontevedra, enviará a aquella ciudad los individuos de su seno que sea necesario para que realicen todos los trabajos necesarios a la finalidad que perseguimos. Allí encontrarán toda clase de facilidades y de medios para realizar esa obra, que tanta gloria daría a nuestra Patria, al propio tiempo que a los que tuvieran la fortuna de desgarrar el velo del origen del insigne almirante.
(Extracto de Sesiones del Congreso.—10 de Mayo de 1922.)
LA NATURALEZA ESPAÑOLA DE CRISTOBAL COLON
El Presidente del Centro Gallego, Sr. Manuel Bahamonde, en atención a que es deber de esa institución el cooperar a todo cuanto pueda constituir un honor para Galicia, al enterarse de la solicitud hecha por el Diputado Sr. Emiliano Iglesias, a fin de que se realicen las investigaciones necesarias con el propósito de comprobar si es cierta la naturaleza española del descubridor de América, Cristóbal Colón, dispuso el envío de los siguientes cables:
“Emiliano Iglesias. Congreso Diputados, Madrid.
En nombre Centro Gallego testimonióles felicitación iniciativa en pro investigaciones afirmativas Colón nació Galicia.—Manuel Bahamonde, Presidente.”
“Presidente Consejo Ministros, Madrid.
Centro Gallego ruégale interponga oficios favor petición Diputado Emiliano Iglesias encaminada comprobar autenticidad documentos indican Colón nació Galicia. Centro dispuesto apoyar gestión tal sentido todos medios.—Manuel Bahamonde, Presidente.”
ESPAÑA RECLAMA A COLÓN
Comienza el Show para ver si el Descubridor nació en Pontevedra.
MADRID, 13 de mayo (Associated Press).
– Se está tratando de demostrar que Cristóbal Colón nació en España.
El tema volvió a ser discutido en el Congreso español cuando el diputado Emiliano Iglesias
El tema volvió a ser discutida en la tarde de ayer en el Congreso español.
cuando el diputado Emiliano Iglesias declaró que los documentos e investigaciones en Pontevedra, Galicia, indicó que el lugar de nacimiento del descubridor de América se encuentra allí. Pidió que la Academia de la Historia se dirige a enviar representantes a Pontevedra para una investigación de la autenticidad de los documentos y otras pruebas.
Ministro de Justica Ordoñez y García se comprometió a remitir la petición al Consejo de Ministros.